La verdad es que estoy consiente de que los cambios son necesarios y en general me gustan...pero a veces me asustan. Este verano, si bien fue el menos dinámico en años (de lunes a viernes de 9 a 6 en una oficina) atravesé por muchos procesos y cambios que no me imaginé que pasarían...no hablo de cambios perceptibles al ojo de los mortales, sino cambios míos...procesos internos que no pensé que llegaran; procesos a los que quizás temí por mucho tiempo...debo decir que este verano por primera vez en mucho tiempo fui consiente de que caminé de la mano del miedo a lo largo de mi vida. Miedo a los cambios, miedo al rechazo, miedo al sufrimiento, miedo al ridículo (aunque suene raro viniendo de mi) miedo al dolor... es increíble lo agotador que puede ser vivir así.
Este verano me han pasado tantas cosas ..buenas, malas, maravillosas... que me di cuenta (no es que no lo supiera desde antes pero quizás ahora lo asimilé) que el miedo es parte de la vida y que la gracia no es no sentirlo sino saber vivir con él. Estos últimos meses he tomado decisiones y riesgos que pensé que ya no estaría dispuesta a correr...di oportunidades a terceros y me di oportunidades a mi misma, oportunidades de perdonar,olvidar,sentir... y me siento bien! creo que parte de crecer y madurar es aprender que las cosas no siempre salen como las planeamos, pero no por eso las experiencias no valen la pena... a veces hay que dejar que todo fluya y dejar que la vida haga un poco de su magia; y así todo se vuelve más divertido.
Tengo que decir que en este momento soy inmensamente feliz, por todo lo que tengo, por todo lo que sueño, por todo lo que hago y lo que haré...y también por todo lo que vendrá...porque cuando salga de la Universidad no importa donde el destino me lleve...sé que será porque yo así lo quise, porque luché por ello y porque pase lo que pase, no dejaré que el miedo vuelva a guiar mi camino.
Y pa' terminar como siempre...esto no tiene ná que ver con todo lo que escribí, pero dejo una frase de García Márquez que me gusta mucho:
"Siempre hay un mañana y la vida nos da otra oportunidad para hacer las cosas bien, pero por si me equivoco y hoy es todo lo que nos queda, me gustaría decirte cuanto te quiero, que nunca te olvidaré"